La Unidad de Género inició el miércoles los cursos de repostería “Mi Dulce Historia”, dirigido a mujeres de los barrios y las comunidades, para coadyuvar en la prevención de la violencia psicológica, patrimonial y económica, a través de la capacitación productiva y el fomento de nuevos emprendimientos.
La maestra repostera enseñará a los participantes a elaborar alfajores de colores, tortas, donas tradicionales y de colores, empanadas árabes y brazo gitano. Según los resultados de estudios socioeconómicos, estos productos son de venta masiva y convenientes por la facilidad de elaboración y los requerimientos de ingredientes.
La responsable de Género, Paula García, manifestó que el ejecutivo José Luis Ábrego instruyó la creación de los cursos con el objetivo de fortalecer los conocimientos y capacidades de las mujeres, generar espacios de intercambio de saberes interculturales que fortalezcan su identidad y promuevan la independencia económica.
“Nuestras actividades buscan fortalecer los lazos familiares, generar emprendimientos en el rubro de en repostería e incentivar la independencia económica de las mujeres; queremos erradicar la violencia psicológica y física, garantizar el trato digno y el respeto de los derechos femeninos en el Chaco”, relató Paula García, responsable de Género.
Se trabajarán con grupos de 15 a 20 participantes de las Organizaciones Territoriales de Base (OTB), organizaciones sociales, naciones y pueblos indígenas originarios campesinos, y otras instituciones de acuerdo a requerimientos. Los cursos tendrán una duración de cinco semanas.
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